Thy Art Is Murder - Human Target

Francamente, nunca me ha llamado la atención el Deathcore. La mayoría de bandas que he escuchado dentro del género se me hacen excesivamente planas y lineales, demasiado centradas en la agresividad porque si y, sobre todo, en hacer el breakdown o breakdowns de turno, sin ningún tipo de matiz que haga su música más atractiva. Algo parecido le pasa a muchos grupos dentro del Metalcore. Sin embargo, como ocurre casi siempre, hay excepciones a la regla.

Puede decirse que los australianos Thy Art Is Murder son, actualmente, una de las principales referencias del género a lo largo del mundo y una de las bandas más conocidas del mismo. No son ni pioneros ni de las primeras bandas en hacer el estilo, pero si surgieron en un momento en el que estilo estaba pegando fuerte, creciendo año a año hasta llegar al status que poseen ahora.

Tengo que decir que sus dos primeros trabajos no me llegan ni me gustan absolutamente nada. Básicamente, porque adolecen de las taras que citábamos antes. Son discos de Deathcore puro y duro, basados en el ataque continuo y en el breakdown de turno, sin más matices, estando el segundo trabajo mejor producido y mejor hecho en general, eso si. Es con su tercer disco, Holy War, donde la banda empieza a introducir ligeros, aunque para mi vitales, matices. Empiezan a jugar con atmósferas, elaboran un pelín más sus canciones, siendo salvajes o metiendo más melodía cuando toca... todo ello recogido bajo la esencia del Deathcore. En sus dos últimos discos, Dear Desolation y este Human Target, todo esto se va a consolidar todavía más, incorporando además influencias externas, inclusive de Black Metal, estando una banda como Behemoth bastante presente en su música.

Así pues, dicho esto, sacaban los australianos el que es su quinto disco de estudio, Human Target. El disco es una auténtica vorágine de odio, teniendo en cuenta además el contexto de los últimos años que se está viviendo, más en concreto, en USA. Creo que el grave problema de racismo que se lleva viviendo allí durante tanto tiempo y que se ha manifestado más que nunca en estos últimos meses, es el perfecto ejemplo de ello. Asimismo, la decadencia general de la sociedad o la crítica a la religión, siguen presentes como en cada disco suyo.

La portada, a cargo de Eliran Kantor, me parece una absoluta maravilla(como ya es de costumbre en este fantástico editor) y perfectamente representativa de lo que se quiere expresar en este trabajo. Una enorme rueda pasando por encima de un numeroso grupo de cadáveres, aplastando sin ningún tipo de piedad. La metáfora perfecta de que como cada vez nos tienen más amordazados, como cada vez nos explotan y nos oprimen más. La rueda de la realidad.

'Human Target' es la encargada de dar comienzo al disco. La verdad es que es un tema la mar de efectivo para ello, ya que posee furia y energía para parar un tren, con sus consiguientes breakdowns, la mar de efectivos, y un solo por ahí bien conseguido.

'New Gods' sube los decibelios y nos entrega una absoluta apisonadora de tema, que apuesta por la velocidad desbordante, apoyada por unos blast-beats, los cuales crean un ambiente desgarrador y devastador, repleto de atmósfera oscura. Otra cosa a destacar son los prominentes coros, muy potentes y al frente, con mucha fuerza.

Seguimos con 'Death Squad Anthem', el tema más sencillo del disco en cuanto a estructura, pero es francamente efectiva. Es un tema a medio paso con unas guitarras muy machaconas, con un estribillo predominante y destacable, que se repite bastante. Muy buena también la actuación vocal de McMahon, con sus guturales profundas y directas al grano, intactas y bien conservadas.

'Make America Hate Again'(que manda un mensaje muy claro) es un tema absolutamente demoledor, que vuelve a apostar por la agresión y la violencia sin piedad, con un trabajo tanto de guitarras como de batería excelso. Una completa apisonadora. Por su parte, 'Eternal Suffering' es un excelente tema, un tema oscuro que nos entrega atmósferas que refleja pasajes muy melancólicos y apesadumbrados, con momentos cercanos a lo que podría ser un Black Metal Atmosférico.

En 'Welcome Oblivion' volvemos antener una muy buena ración de Deathcore, agresivo y bien potente, con unos breakdowns la mar de inspirados y acertados, como consecuencia de un buen trabajo en cuanto a riffs de guitarra.

'Atonement'(demoledora y con pasajes que me llegan a recordar bastante a Behemoth), 'Voyeurs into Death'(bastante técnica y brutal, en la que se acercan bastante al Death Metal), 'Eye for an Eye'(otro tema con mucha atmósfera y mucho trasfondo blacker), y 'Chemical Christ'(demolición asegurada) finiquitan de manera más que satisfactoria el trabajo. Como en su anterior trabajo, Thy Art Is Murder no dudan en incorporar otros matices(sobre todo, ligados al Black Metal) a su música, sin que ello afecte a la esencia del grupo. Y bien que les está yendo, tanto en lo musical como en el crecimiento que ha tenido la banda durante estos últimos años.

Así pues, Thy Art Is Murder continúan por la senda iniciada en su anterior disco Dear Desolation, incorporando de nuevo esos ligeros tintes blackers, que enriquecen un poco más su propuesta musical y los sitúa bastante por encima de la mayoría de bandas actuales de Deathcore. A mi, que en lo personal apenas me gusta el género, me ha molado bastante esta banda desde que descubrí este grupo. Por lo tanto, un conseguido 8/10 para Human Target.