
CD 1
1.Der Mitternachtslöwe
2.Gothic Kabbalah
3.The Perennial Sophia
4.Wisdom and the Cage
5.Son of the Staves of Time
6.Tuna 1613
7.Trul
8.Close up the Streams
CD 2
1.Wand of Abaris
2.Three Treasures
3.Path to Arcady
4.TOF – The Trinity
5.Chain of Minerva
6.The Falling Stone
7.Adulruna Rediviva
No me cabe la menor duda que muchos de los seguidores primerizos de Therion se tirarían de la melena al ver esto. Fenómeno que podríamos repetir en tantas bandas del feudo extremo que fueron mutando poco a poco hacia propuestas sinfónicas, góticas y melódicas sin perder cabe decir ese poso oscuro que tanto les caracteriza. Aunque distintas, podríamos concebir como tales a Katatonia, Anathema, The Gathering, My Dying Bride e inclusive Paradise Lost. Ninguna de ellas está exenta de polémica.
Aunque como uno aquí tiene predilección por sus etapas más tardías, ya me está bien así. Claro que en Therion disfruto con “Of Darkness” o “Beyond Sanctorum”. Pero es que “Theli” y “Vovin” me enloquecen. Como lo hace también este “Gothic Kabbalah” de 2007. Aunque claro, no sería justo antes de entrar en nuestros asuntos no decir que todo lo que hay en medio de lo citado (que nos es poco), es igualmente excepcional. Toda la trayectoria de Therion (al menos hasta donde nos encontramos) es para quitarse el sombrero (de copa).
Después del seminal doble lanzamiento de 2004 con esos “Lemuria” y “Sirius B” en los que volvieron a salirse como de costumbre sacándose de la chistera una propuesta que sorprendió a todo el personal, dándole otra vuelta más si cabe a su ambiciosa propuesta. Un material no apropiado para cualquier momento. De absorción lenta y maduración necesaria. Como también lo es “Gothic Kabbalah”. Un álbum que si bien es cierto que cuenta con dichos condimentos es oportuno explicar que puede que simplifique un poco la propuesta. Se trata de todas formas de una obra igualmente excelsa, pomposa y grandilocuente como ella sola. Pero después de lo exigido en sus dos precedentes, era necesario una entrega como la que nos ocupa.
El trabajo de 2007 aun siendo un doble disco con sus respectivas largas duraciones tan características de este subgénero del metal, muta hacia estructuras compositivas más cercanas al pop y al rock para después vestirlo todo con los arreglos, matices y detalles orquestales, sinfónicos, góticos y como le queráis llamar. Una obra de descongestión por tanta complejidad ofrecida pero que mantiene sin ningún tipo de problemática el nivel.
Un viaje muy ameno y agradable por los diferentes pasajes ofrecidos por los suecos basados esta vez en las investigaciones de su compatriota pensador del SXVII Johannes Bureus, de la escuela esotérica. Como es habitual en los de Christofer Johnsson, todo envuelto de una mística, intriga y misterio (muy acordes a la trama) deliciosos que invitan al oyente a sumergirse sin dudarlo en su fantástica música. Y como tampoco podía ser de otra forma, un despliegue espectacular a nivel de personal sin el cual no se podría entender el fantástico resultado final. Una gran capacidad de movilización en la cual sopranos, tenores, coros, órganos, flautas y armónicos varios se ponen al servicio del metal para cuajar una de las mejores obras del género en el SXXI. Así de grande es este trabajo. Por innovación. Por frescura. Por valentía. Por arriesgar. Porque lejos de repetir esquemas Johnsson nos deleita con otro trabajo superlativo.
Una obra que, para qué nos vamos a engañar, todos los puntos fuertes y sus calidades mentadas pueden funcionar a la vez de inconvenientes para todo aquel que repudie este tipo de composiciones y formaciones grandilocuentes. Por lo que encararla puede ser todo un reto para según quien. Importante entrar con cautela, pues en el interior del plástico hay un banquete excelso, fresco y variado, más podemos quedar empachados rápida y fácilmente si no nos tomamos el asunto con calma y serenidad. Por eso uno aquí que recomienda afrontar los dos álbumes de forma independiente. Solo los más curtidos en la materia lo podrán degustar sin problema. Y como las aventuras empiezan por el principio, esto va ser nuestro mejor aliado.
El primer disco además de ser un pelín más corto es superior a la continuación, por lo que rápidamente caeremos rendidos a todas esas sinfonías, voces femeninas, contrastes, oscuridad de la mano de cosas como la inicial "Der Mitternachtslöwe" (hipnótica como pocas), el tema título -ya un himno a corear-, la preciosa “Perennial Sophia” (el vello de punta) o las espectaculares “Tuna 1613” y “Trul”. Una gozada que no es que cese en el segundo asalto. Igualmente espléndido aunque puede que más exigente para el oyente.
Pues qué decir desde el magnificente single de “Wand of Abaris” hasta la omnipotente “Adulruna Rediviva” (que rodea el cuarto de hora) y pasando por piezas de la magnitud de “Three Treasures” o “Chain of Minerva” se demuestra que lejos de decaer la cosa se mantiene con acierto.
Así pues como dije en el caso de Within Temptation, prejuicios bien lejos. Una vez realizado dicho ejercicio; calma, relajación y dadle al play. El resto lo ponen Therion. Aunque si os da pereza dicho trabajo os ofrezco una alternativa en forma de directo. “Live Gothic”, su presentación en vivo, es otra gozada por la que poner los cinco sentidos en la banda y su performance. Esto es arte, y como tal no se limita al sonido. Nada pues, un abrazo a los death metaleros que les pueda parecer que esto es un bodrio. Uno aquí que se dispone a jugarse el pellejo y calzarle a “Gothic Kabbalah” cuatro góticos cuernos que rozan los cinco para una de las obras que hacen del metal un género aún mejor si cabe.
Therion
Christofer Johnsson: Guitarras, teclados y programación
Kristian Niemman: Guitarras, teclados
Johan Niemann: Bajo, guitarras
Peter Karlsson: Batería, guitarras, teclados, percusión, coros, voz ("TOF - The Trinity" & "Chain of Minerva")
Colaboradores
Mats Levén: Voces, guitarras
Snowy Shaw: Voces
Katarina Lilja: Voces
Hannah Holgersson:Voces, solo de soprano
Invitados
Jonas Samuelsson-Nerbe: Solo de tenor ("Tuna 1613", "Path to Arcady", "Adulruna Rediviva")
Anna Nyhlin: Solo de soprano ("Path to Arcady" & "The Falling Stone")
Karin Fjellander: Soprano de coral
Ken Hensley: Hammond
Joakim Svalberg: Hammond
Rolf Phlotti: Flauta ("Gothic Kabbalah" & "Trul")
Stefan Glaumann: Pandereta