Saratoga - Aeternus

Saratoga son, hoy por hoy, punta de lanza del metal cantado en castellano y, desde luego un referente de nuestra música tanto aquí como al otro lado del charco. Además, tras 13 discos de estudio, 28 años de carrera musical como tal (ni que decir de la extensa historia de sus cofundadores Niko del Hierro y Jero Ramiro) y cientos de conciertos a sus espaldas, se encuentran en un estado de forma excepcional, lo que se traslada tanto a sus directos como a sus trabajos en estudio.

El nivel que dejaron Saratoga con su anterior "Morir en el bien, vivir en el mal" era alto, muy alto. Con este "Aeternus", que vio la luz a finales del 2018 y es su última grabación hasta hoy, lograron mantener el referido nivel, y nos dejaron un puñado de temas que hicieron, y hacen, las delicias de sus seguidores y de aquellos que quieren acercarse a su música.

Y es que "Aeternus" no esconde ninguna novedad, más allá de los guturales que comienza a utilizar Tete Novoa y que endurecen un poco su propuesta (una delicia los viejos temas "guturalizados" en directo); no es un compendio de sonidos nuevos, de estructuras nuevas ni de sorprendentes cambios de horizonte; "Aeternus" es heavy metal, Saratoga es heavy metal; pues aquí hay más de dos tazas. Heavy metal que ya se respira, se siente en "El olvidado de dios", inicio brutal del disco y primer avance en el que Tete susurra, utiliza guturales y sube el tono hasta niveles máximos, y toda esa versatilidad, acompañada de un Jero enorme, un buen Niko y la bestialidad de Dani en las baquetas hace que sea una de los temas estrella del álbum.

"Una vez fuimos héroes" engancha desde el principio; guitarras demoledoras y una batería aplastante conducen el tema hasta un brillante estribillo que se te queda en la cabeza, todo está en su sitio, una producción brillante y con un empaque que transmite toda la fuerza de nuestro amado heavy metal. Y como no hay dos sin tres, "Tres ahorcados", ganchera hasta decir basta!; es cierto que es menos cañera que sus antecesoras, con alguna pincelada power, pero... un tema más para la saca de los conciertos y que la peña la coree hasta la extenuación.

"Renegado" es el tema "diferente" del disco, tal vez por ser un poco más oscuro, menos fácil de escuchar; esos ritmos un poco más pesados hacer relucir la batería de Dani, a la vez que Tete se muestra más versátil que en el resto de temas, bajando el tono sin llegar a hacer guturales y acompañando el estribillo con unos coros potentes que desembocan en un "solazo" de un Jero en gran forma. A continuación vuelta a la velocidad, a los Saratoga más desbocados, Tete doblando agudos y guturales, Dani a toda ostia con sus baquetas, Niko sujetando el huracán de guitarrazos de Jero; espectacular tema que a veces me recuerda a "Como el viento" de su antecesor de 2016.

"Si tú no estás", otra de las estrellas del disco por su ritmo y estribillo pegadizo, otro tema hímnico, que en directo ha hecho las delicias de los asistentes. Tema de Niko en el que hay lugar a su lucimiento y calidad, fuera de toda duda, no obstante por eso es uno de los grandes bajistas de la piel de toro, y en el que también Jero deja su impronta. Sigue "Acuérdate de mí"... sé que es difícil que Saratoga superen algún día aquel maravilloso "Si amaneciera" de su inmenso "El Clan de la Lucha", pero si hay un tema candidato a ello es sin duda este; maravillosamente cantado por Tete y con una fuerza que pone la carne de gallina al mismo tiempo que juega con los sentimientos de aquellas personas que en su vida han sufrido el desaliento de la depresión, de la soledad; solo ontológico de Jero y un final brillante; sin duda uno de los mejores, si no el mejor tema del disco.

Vuelve la tempestad, que ya no se marchará en este último tramo del disco, con "Culpo a dios", de nuevo estribillo coreable, heavy power de manual pero efectivo, que nos conducen a "Cien mil veces no", ralentizando un ápice el motor, donde Tete comienza bajando un poco el tono para ir creciendo poco a poco hasta desatar todo ese vozarrón que atesora. Cierra el buenísimo trabajo "Siempre hacia el sol", heavy power a toda ostia, rompecuellos, mostrando las virtudes de los cuatro músicos, Tete se muestra muy cómodo, subiendo sus agudos de forma magistral, y superponiéndolos con algún gutural y Dani… sin temor a equivocarme, este señor es uno de los grandes baterías del universo metálico actual; una puta máquina.

Al final, la mejor banda de heavy metal hispano actual demuestra el porqué de tal afirmación; en un estado de forma envidiable, hacen las delicias de aquellos que seguimos disfrutando del heavy metal de siempre; y sin que ello sea la negación de todas las movidas actuales, que sin duda las hay de calidad exquisita, aunque no deberían olvidar las raíces, desde las cuales crecer.

He dicho.