Primevil - Smokin' Bats at Campton's

Enviado por Richyhim el Mié, 21/10/2015 - 14:29
3698

He aquí unos de esos tantos grupos que aparecen, debutan con un buen álbum, y se disuelven permaneciendo en ese selecto ramillete de grupos de culto.

Primevil se formó en Indianápolis (Estados Unidos) a principios de la década de los 70, aunque no sería hasta un par de años más tarde cuando editaron un single y comenzaron a girar de manera puntual y siempre local. Ya en 1974 aparece este "Smokin' Bats At Campton's", un álbum donde el rock psicodélico, el blues rock y el hard rock de la época se dan la mano para formar un cóctel que formaría uno de los primeros retazos de lo que hoy se conoce como stoner rock, y que curiosamente fueron etiquetados como "los últimos pioneros del heavy metal".

Detrás de un portada que a mí me causa espanto, y que fue diseñada por Nancie Scott, encontramos un álbum vibrante compuesto por una serie de músicos fantásticos aunque todavía poco curtidos en esta materia, algo que aquí ni se percibe, y es que el ejercicio instrumental que plasman es digno de ser destacado.
La producción es sobria, sin colorantes ni conservantes, sin añadidos ni estupideces varias, solo lo necesario para que suene en condiciones.

Comenzamos el disco con "Leavin'", y lo hace de manera sosegada y con unas guitarras acústicas en primer plano. Tras unos fraseos vocales, la composición explota con riffs cortantes y una base rítmica que destaca de buenas a primeras. Las voces se vuelven más rasgadas, y de cuando en vez se desmarcan con estupendos solos de guitarras. Todo esto con cambios de ritmo muy interesantes. Primer corte y primer pelotazo.
En "Progress" destacan las líneas de bajo funky del señor Mark Sipe, sobre todo en los primeros compases, aunque poco a poco se van añadiendo el resto de instrumentos. Un estribillo corto, conciso y machacón aparece en escena mientras los músicos se emplean con toda su destreza, e incluso Dave Campton se atreve a dejarnos ligeros y ácidos momentos desarrollados con su armónica.

"Fantasies" es un corte instrumental que comienza destacando por sus guitarras acústicas. Un escaparate ideal para que cada uno de los músicos plasmen toda su creatividad, y vaya si lo hacen. Conforme van pasando los segundos, las guitarras eléctricas aparecen para dibujar excelentes melodías durante diferentes momentos, a la vez que la base rítmica vuelve a ser tremendamente notable. El final, bluesero e incendiario. "Pretty Woman" aparece en escena y nuevamente es el bajo de Sipe el que se encarga de guiar al resto de sus compañeros. Se trata de un corte de puro hard rock con riffs contundentes y donde se nota a leguas la tremenda compenetración de Dave Campton y Jay Wilfong en las seis cuerdas.

En "Tell Me If You Can" las ideas son claras. Hard rock aderezado con auténtico blues interpretado desgarradoramente por las voces de Dave. Ahora bien, lo curioso llega con "Hey, Lover", pues fue escrita y grabada en una sola noche en un ejercicio de espontaneidad francamente efectivo. Un corte alocado con riffs estupendos, y las histriónicas voces de Campton y Lucas.

"High Steppin' Stomper" es de lo mejor del álbum. Ya con un Dave centrado totalmente en las voces, interpreta magistralmente y es llevado en volandas por el resto de músicos. Aquí todo está más calculado y suenan mucho más refinados y menos ásperos, aunque los riffs de guitarra sieguen siendo ásperos y la base rítmica colorista con puntuales adornos.
"Your Blues" la más extensa de las composiciones es la que se encarga de despedir el disco, y lo hace con clara vocación blues, con un Campton totalmente entregado a las armónicas, y un tempo lento aunque intenso. La interpretación vocal, unas veces elegante, otras veces inquietante, se encarga de guiar los sentimientos, mientras a partir del minuto cinco se empiezan a escupir violentamente notas que emanan de un solo de guitarra espectacular.

"Smokin' Bats At Campton's" es un álbum corto que apenas rebasa los 35 minutos de duración, pero son suficientes para comprobar el talento de estos músicos. Un disco que ha cosechado multitud de piropos, aunque siempre desde el lado más "underground" de la música rock, por lo que hoy en día está considerada como una obra de culto. Yo pude comprarme este álbum en su momento, y cuando lo hice pasó a ser una de las joyas de mi colección de discos. En su momento se publicó en vinilo pero era muy complicado de conseguir, hasta que Radioactive se decidió a publicarlo en 2006 en formato CD, y comenzó a ser mínimamente visible.

Dave Campton (Voces y percusión)
Larry Lucas (Guitarras acústicas y eléctricas, coros)
Jay Wilfong (Guitarras eléctricas)
Mark Sipe (Bajo)
Mel Cupp (Batería)

Sello
700 West