
1. The Great Southern Trendkill
2. War Nerve
3. Drag The Waters
4. 10's
5. 13 Steps To Nowhere
6. Suicide Note Pt. I
7. Suicide Note Pt. II
8. Living Through Me (Hells' Wrath)
9. Floods
10. The Underground In America
11. (Reprise) Sandblasted Skin
Desde mi tardío descubrimiento de Vulgar display, etc anduve empollando con ansia todos los discos de Pantera en su etapa con Phil Anselmo, y me quedo sobre todo con éste. Da la impresión de que cada vez trataban de ser un poco más burros, y quizá tocaron techo aquí. Muy burros, sí señor, y muy esforzados: casi se puede oler el sudor de sus deportivas. Y aquí hay unas letras que hablan de suicidio y todo. Bueno, bueno. Todos estos discos tienen un sonido que me recuerda a la gente acomplejada, al “quiero y no puedo”, al culturista que se empeña en tener más gordo el brazo, y más, y más... pero no puedo evitar rendirme ante la calidad del resultado.
Ni intros ni leches: el disco empieza con todos a la vez aporreando y chillando un ratito largo. Más o menos cuando se le acaba el aire al cantante, entra el primer riff estrambótico de D. Darrell y ya la tenemos liada, es sin duda otro disco de Pantera más. War nerve lo confirma, aplastándote como si te estuvieran emparedando. Drag the waters es directamente como estar enterrado vivo. Aprovechando que el pulso del disco va ralentizándose, en ese punto te clavan la lentorra y atormentada 10’s, que puede ser un poco pelma pero acaba entrando si perseveras.
Y cuando hemos tocado fondo, convertidos prácticamente en una lombriz, 13 steps to nowhere nos vuelve a despertar y sacamos la cabeza de la tierra. Madre mía, qué pejíos pega el Ambrosio ese, digo el Anselmo. En esta canción (y en muchas otras) no se cortaron un pelo a la hora de grabar descaradamente dos voces, que se van contestando, y el resultado es doblemente brutal. Como el tipo puede tomar aire y concentrarse en cada grito, se monta un escándalo abrasivo a más no poder. Esta música se basa sobre todo en el puro timbre de los instrumentos: pues toma timbre. El desarrollo central de esta canción nos lleva de nuevo a pisar fuerte, como con botas de buzo. El lenguaje musical que busca la brutalidad en la lentitud era algo que ya fluía en ellos como agua.
Todo prosigue con un grado de ceremonia muy alto para lo que cabría suponer en un grupo que lleva sombreros de cowboy en la cabezota. Las dos canciones suicidas que siguen, basada en la superproducción la primera y excesivamente bruta, hasta lo insoportable, la segunda, desembocan en Living through me, que nos coloca de nuevo en el “panterismo” puro y nos deja preparados para la insuperable traca final. Aquí llega mi favorita, Floods, llena de ambientes aplastantes y deprimentes, que de pronto desemboca en unos arpegios suaves seguidos de un solo fuera de serie, tocado con el ampli (o los cuarenta amplis en fila) puestos a un volumen que roza lo ridículo. En este solo Darrell da una auténtica lección de cómo manejar con sutileza semejante bestia incontrolable de equipo. Otra ronda de pasajes tormentosos, y la canción acaba con unos arpegios mágicos que reexponen el motivo del solo y te dejan como adormecido.
Buen momento para, sin previo aviso, desbaratar lo que quede de tu pobre cabeza con los dos trallazos finales, que se basan en un mismo riff principal pero entendido de dos maneras diferentes. Nada nuevo: más gritos, geniales riffs gelatinosos y dobles bombos (y más y más y más...), y por fin podemos descansar un rato. La verdad es que hay que echarle agallas para escuchar este disco entero, pero es de esas cosas en las que vale la pena entrar.
Si Onán, hay que perseverar
Vuelvo a revisar mis cds, que tengo tiempo sin repasar y ahí está The Great Southern Trendkill de Pantera. Yo me había anclado en su trilogía más famosa. Al repasar esta producción, quedo con la boca abierta. Un disco de Heavy Metal abrasivo, cortado, lacerante, oscuro, deprimente, brutal, violento, lleno de rabiosas voces por todos lados, mejor dicho, gritos, casi no convencional, hasta guitarras acústicas suenan, dejando claro que los Pantera de siempre están en dos canciones: War Nerve y Living Through Me (Hells' Wrath). Las demás canciones, están en un marco rozando la demencia, pero en total control. Riffs y Solos estrambóticos y perforantes, excelentes líneas de bajo y Vinnie Paul sacándole todo lo que puede dar una Batería, todo lo que se puede hacer con este instrumento. De esas malsanas canciones, mi favorita es Floods, que tiene uno de los mejores solos que haya grabado el gran Dimebag, que te ayuda, con la atmosfera angustiante que tiene la canción, que te da la sensación de estar muriendo en esa inundación a la que hacen referencia, por cierto, el solo muy bien armonizado con el bajo de Rex Brown. En cuanto a Anselmo, canta como si el veneno, del gran asesino del sur, estuviera corriendo por sus venas, totalmente desquiciado, a un nivel casi insoportable.
Pantera, la banda polémica y trágica, fundada por dos hermanos en Texas. Polémica, por su salto, sin ton ni son, del Glam al Groove, que ni en el Portal, se salvaron de la misma, en una épica Reseña de toma y dame, con usuarios de lado y lado, teniendo yo la “dicha” de haberla leído. Trágica, por el asesinato de Dimebag, de la manera más cobarde en que se puede matar: dispararle a alguien desarmado. Pero ahí quedo su legado, para bien o para mal, para odiarlo o amarlo. En el “Behind the Scenes, dedicado a la banda, la parte más dolorosa, es cuando su padre, Jerry Abbott, productor, musico y reconocido compositor de música Country, dice ahogado por las lágrimas, que lo más que extraña, es cuando Dimebag lo visitaba y siempre le decía: Dad I love you.
Discazo
solo superado por Reinventing The Steel. Es curioso como a dia de hoy, después de haberme escuchado los 5 discos (los de los 80 no tanto) cientos de veces, mi top de preferencias a cambiado drásticamente. Durante mucho tiempo mi orden de favoritos era prácticamente cronógico, siendo el Cowboys el primero, el Vulgar de segundo, el Reinventing de tercero, Far Beyond cuarto y este Great Southern de último, pero a dia de hoy mi orden de favoritos va totalmente al revés. Al haber escuchado los hits de turno durante años, algunos de esos temas ya no me molan tanto, en cambio, otros discos como el Reiventing o el Great Southern los he redescubierto como nunca.
La sensación que me produce escucharlos a dia de hoy, es que a partir del Cowboys, en cada disco se superaron un peldaño más con respecto al anterior.
Forced
Nada mal el material, para que lo toques al completo. Que se habra fumado o bebido Dimebag, para semejante y brutal perfomance.
jajaajaja
Hay un detalle que siempre comento y es que durante una época de mi vida en la que dejé de escuchar Metal en general (estaba más metido en otros géneros como el Soul, el Jazz, el Funk y el Hip Hop y el rock progresivo principalmente) la única banda que era capaz de escuchar de vez en cuando era Pantera. Nunca fue mi banda favorita (siempre he sido mucho más fan de los Maiden por poner un ejemplo) pero nunca ha habido otros como ellos. Que no me voy a poner a discutir si fueron quienes inventaron el dichoso groove metal pero que fueron quienes mejor lo practicaron no lo dudo ni un segundo. Ni Machine Head, ni Pissing Razors o Skinlab ... ninguna banda del rollo les llegó a la suela de los zapatos haciendo algo similar.