Obliveon - From this Day Forward

Enviado por Witchfyre el Sáb, 17/09/2022 - 11:59
Obliveon

1. From This Day Forward (04:57)
2. Fiction of Veracity (08:36)
3. Droïdomized (06:43)
4. Imminent Regenerator (05:02)
5. It Should Have Stayed Unreal (4:04)
6. Access to the Acropolis (04:14)
7. Chronocraze (05:46)

Álbum completo: Youtube

A la mayoría el nombre de Pierre Rémillard no os dirá gran cosa, pero deberíais saber que, por las manos de este hombre, ha pasado buena parte de la escena extrema de su país (desde Cryptopsy hasta Anvil, pasando por Voivod, Gorguts, Kataklysm, Infernäl Mäjesty, Martyr, Ion Dissonance ...). Igual que otros que acabaron labrándose un nombre tras la mesa de control (Andy Sneap, Waldemar Sorychta), la carrera de Pierre empezó a finales de los 80, instrumento en mano, aprendiendo lo necesario para sacar adelante las grabaciones de su banda sin apoyo externo y, a tenor de lo que se puede escuchar ya en este From this Day Forward, fue mucho y muy pronto. Nada había grabado antes del álbum de debut de sus Obliveon, salvo sus propias demos, asumo, hasta cinco en tres añitos, pero es que este LP suena realmente de puta madre. Algo insólito para un debut autoproducido que, tranquilamente, podría venir firmado por un Scott Burns o un Randy Burns de la época. Nada que ver uno con otro, a pesar del apellido, estos no son como los hermanos Morris.

Y digo LP porque, hace unos cuantos años ya, tuve la fortuna de encontrar, contra todo pronóstico y de forma totalmente inesperada, una flamante edición original de Active Records por un precio muy asequible en una tienda de Gijón. Creo recordar no haber pagado más de 25€ y estas copias en el mercado online hoy en día no bajan de los 100... lo siento mucho, pero tenía que contarlo. Estas son las adquisiciones que más feliz me hacen. Entras en una tienda cierto día a probar suerte y te marchas de allí con una verdadera joyita porque, no dudéis ni por un instante, From this Day Forward es un hallazgo de incalculable valor, tanto en el aspecto musical, como en el económico, las cosas como son.

¿En qué andaba enredado el bueno de Pierre en sus años mozos? Los que hayan respondido “thrash metal técnico", independientemente de las etiquetas que yo haya puesto, habrán dado en el clavo, o casi. ¡Un gallifante para vosotros! Quién no sepa de qué hablo, que seréis muchos, que investigue por ahí, si tiene curiosidad. Sin embargo, ya citando los nombres de Andy Sneap y Waldemar Sorychta al principio, ambos a vueltas con sus Sabbat y Despair por la misma época, tampoco era tan complicado apuntar en esta dirección. Por alguna razón, esta gente que tanto sabe de música, con frecuencia escoge algo donde poder mostrar sus dotes y, como el metal progresivo no me hace mucha gracia, siempre he sentido cierta debilidad por las bandas de thrash metal técnico. Un poquito más agresivo de lo habitual en esta ocasión. No suenan ni tan oscuros como Sabbat, ni tan melódicos como Despair, Obliveon tenían un pie bien plantado en las tendencias más técnicas del florido Estado al sur de sus vecinos, los Estados Unidos. Muy en la línea de Hellwitch, Nocturnus, Cynic y Atheist (con los que compartían sello, por cierto) andaban estos muchachos en 1990, lo que los sitúa totalmente a la vanguardia de la escena extrema de finales de los 80. Al loro que en aquel mismo momento debutaban estos con Piece of Time, The Key y Syzygial Miscreancy y Cynic acababan de sacar su primera demo “seria". Creo que no es una coña el dato.

Vale que Obliveon no suenan tan oscuros como unos Nocturnus o unos Death, pero, definitivamente, esto supone un paso adelante en términos de brutalidad respecto a los Coroner, Deathrow, Mekong Delta, Hexenhaus o Voivod que seguro les sirvieron de influencia. Casi todos europeos, curiosamente. Son apenas unos segundos y el tema título ya demuestra que no se trata de una banda conformista. Unas acústicas con aires a Atheist, una batería de influencia jazzera y un bajista, Stéphane Picard, que encima canta, muy protagonista. No debe ser nada fácil y lo digo porque lo he intentado, con poco éxito, cantar unas líneas vocales y tocar el bajo a este nivel sin seguir en ningún momento los riffs de guitarra. Hay que tener mucha cabeza para esto, chavales y Picard, Rémillard, Gagné y Demers, la tienen. Joder, en apenas dos minutos han cambiado cinco veces de ritmo, más que otros en un tema completo y este dura 5... ni siquiera es de los más largos. Imaginaos lo que pueden llegar a hacer en los más de 8:30 que dura la siguiente, Fiction of Veracity, que, encima, me parece la mejor de todas.

Comienza con un punteo ligeramente estridente, un bajo atareadísimo y un ritmo de batería de lo más elaborado. En apenas dos minutos ha pasado de todo otra vez y ni siquiera ha entrado la voz todavía, perfecta para el estilo, muy similar a la de los Kelly Shaefer, Schuldiner y Paul Masvidal, aunque con algún deje thrasher a lo Darren Travis de Sadus. De hecho, por momentos esto me recuerda mucho también a A Vision of Misery, sólo que un par de años antes. No lo olvidéis, 1990, año de Spiritual Healing, Piece of Time, The Key..., quien me diga que suenan deritativos, ya se puede ir yendo a tomar por culo. Hay tanto thrash como death metal por aquí un poco mas de lo primero, quizás, aunque Obliveon aciertan a bajar un poco las revoluciones, controlando el tempo de los temas y haciendo todo más escuchable. Droïdomized es un ejemplo perfecto con una sabia alternancia entre partes muy rítmicas y otras más rapidas, fantásticamente secuenciadas y con un continuo alarde de musicalidad siempre justificado. Hay que comprender que, en el fondo, es uno de los objetivos de la banda y desde esa perspectiva hay que acercarse a ellos. No vengas buscando ritmos facilones y estribillos pegadizos, nada más lejos de su intención. Y, aún con esto, alguien que pone ciertos reparos a los tecnicismos extremos, como yo, disfruta de todos y cada uno de los 39 minutos de componen From this Day Forward.

Más rápida y retorcida todavía es Imminent Regeneration, con algunos momentos realmente descacharrantes, pero sin perder nunca el control. Un poquito más controlada, It Should Have Stayed Unreal se atreve con fragmentos melódicos y atmosféricos en su tramo central, con mucha influencia del rock progresivo, como no podía ser de otra forma en una banda canadiense abierta de miras. Supongo que no es casualidad que aquel país justamente haya dado bandas como Rush, Triumph, Sacred Blade, Voivod, Annihilator o Gorguts y Obliveon continúan esa loable tradición de metal avanzado a su tiempo y siempre en continua evolución. Craso error sería el de probar con este LP buscando un arraigo en estructuras convencionales y ganchos a los que afferrarse. En ningún momento pretenden Obliveon resultar accesibles y, por supuesto, su enfoque lírico futurista va totalmente en consonancia con sus aspiraciones artísticas. Vuelvo a decir que, en 1990, estos no eran recursos tan sobados. Ya sabemos que el rollito espacial le va que ni pintado a estas historias tan vanguardistas y “proggies". Una pena que la portada parezca pintada por un fan de los dinosaurios de 10 años asistiendo a clases de dibujo y no envuelva un poco mejor el conjunto. No es que sea abiertamente una mierda, pero luce muy sosa en la carpeta de un vinilo con esos 31 centímetros a los que convenía sacar buen partido si querías llamar la atención en una tienda de discos. Un poco "Picapiedra" para mí gusto, imaginaos esto con una buena ilustración del Seagrave en su lugar...

He soltado bastantes y añado alguno: Coroner, Deathrow, Voivod, Sadus, Cynic, Death, Atheist, Gorguts, Pestilence, Anacrusis, Revenant, Hexenhaus... nombres que surgen con más o menos frecuencia cuando nos referimos a thrash y death metal altamente técnico y con inclinaciones progresivas. ¿Y qué hay de Obliveon? En pocos lugares los encuentro yo recomendados y es complicado practicar este estilo mejor que ellos. Si no lo habías hecho ya, añádelos inmediatamente a la lista y, a poco que te vayan estas historias, hazte un favor y dales unas cuantas vueltas, al menos, a sus dos primeros trabajos. Son de lo mejorcito que se ha hecho dentro de esta movida.

8,5/10

- Stéphane Picard: voces, bajo
- Martín Gagné: guitarra
- Pierre Rémillard: guitarra
- Alain Demers: batería

Sello
Active Records

Yo creo que tira más para el Thrash que para el Death, aunque tiene también cositas.
Me han sorprendido muy gratamente, tío. A mí con estas bandas tan técnicas, muchas veces se me hacen un poco "peñazo". En ocasiones se hacen demasiado enrevesadas y cuesta seguirlas, pero aquí no, un disco que se escucha muy bien. Ameno y variado, con estructuras complejas pero que se siguen bien.

Yo, como te comenté, les noto mucho de los -Coroner- en especial, por las voces. Y después a los -Atheist-, Cynic, Death.. de todos ellos tienen cositas, aunque ya te digo, que los veo más Thrash.

Me sorprendió mucho la producción, que para ser su disco debut, suenan de puta madre. Parecen una banda más rodada y experimentada, eso denota que hay mucha clase ahí, o es que los tíos ya tocaban en otras bandas o estilos. Porque suenan muy sólido y compactos. Se cascan buenos pasajes lentos con guitarras acústicas que son una gozada. Tienen una parte muy guapa, en el final del quinto corte, haciendo unos arpegios muy elegantes, que sirven para enlazar con la siguiente canción, quedándoles muy chulo.

Pensé que se lo había producido el Scott Burns, y te leo, y veo que fue otro fulano, que no lo conocen ni en su casa..jajjjaj... Al parecer, este productor no volvió a trabajar con ninguna banda más de metal. Una lástima, porque el tío sabe como producir grupos de este palo.

39 min de álbum que merecen la pena, aunque, ya digo, no seas muy fan del estilo.

En el LP aparece como productora la propia banda. Luego es un tal Michel Lachance el que lo grabó, pero entiendo que este hizo simplemente labores de ingeniero en el estudio. Es decir, el tío que les ayudó a buscar sonido y que aprieta el botoncito mientras los músicos graban, jajaja. Aquí la clave tiene que ser su propio guitarrista, Pierre Rémillard y este sí que es un productor de cierto renombre. El tío tiene sus propios estudios y ha producido mogollón de bandas de metal conocidas: Anvil, Krisiun, Kataklysm, Gorguts (suya es la producción del mítico Obscura), Cryptopsy, Infernäl, Mäjesty, E-Force, Ion Dissonance, Voivod... Seguramente es el productor más conocido dentro del metal extremo canadiense.

Luego, a mí me pasa lo mismo. Sabes que tampoco suelo ser amigo de los extremadamente técnico y retorcido. Me acaba aburriendo, pero en estos tíos noto cierto equilibrio entre técnica y composición. Los temas me resultan entretenidos, variados, pero con lógica. Diversos, pero bien estructurados. Como dices, tienen cierto gusto también para las melodías, pasajes acústicos elegantes... no es una banda sin cierta sensibilidad. Y sí, a mí me suenan más a thrash que a death metal, pero tienen algo de ambos estilos. Suenan a Coroner, por supuesto, seguramente a Voivod también, pero yo les veo mucho en común también con los álbumes más técnicos de Sadus y con Atheist o Helwitch, que son dos bandas muy técnicas también a medio camino entre el thrash y el death. Lo que me da un poco de pena es que creo que poca gente les va a dar una oportunidad y me parece que esa portadilla tiene bastante qué ver, jajajaja. Confiaba en que tú sí te pasarías y los encontrarías interesantes. Son muy buenos y el siguiente, Nemesis, también merece mucho la pena.

Es que yo miré en el apartado -Recording- a un fulano muy desconocido, pero si me dices que fue el guitarra, ese sí, que produjo la hostia de grupos. Es que ya decía yo que el disco sonaba muy bien, y me parecía raro que ese tío no siguiera produciendo. Supongo que este fue el que era el dueño de los estudios y se limitó a apretar el botón. Y el guitarra fue el que realmente dirigió el cotarro.

Es que esta banda saben hacer un disco enrevesado pero al mismo tiempo atractivo, y que la gente se lo escuche. No excesivamente largo, 7 temitas, sin mucha duración, y al final te lo bebes todo, y hasta dices, joder, pues estaba bien la cosa, oye, igual pruebo con otro disco (que es lo que voy a hacer yo..jajajaj).. Es que parece una banda con una madurez y tablas de una gente que llevaba años tocando.

Es que estos estilos por aquí son muy arriesgados. A lo mejor hay gente que pincha algo el disco, pero empiezan esas estructuras así algo retorcidas, ven que hay que pararse un poco, y lo dejan...jajaja.. No hay afición aquí para esas bandas. Yo porque colgaste un tema, me moló, y me lancé, pero sino igual pasaba de la banda...jajja

En la sección videos estuve por poner algo de Thrash, pero es que no hay público para esto, pero bueno, con tanto Thrash últimamente por las reseñas, al final sólo estoy con este estilo todo el día..jajajajaj

Básicamente porque es lo que estoy reseñando yo. Y, como la única alternativa es el gótico-sinfónico de Vesper, parece que hay mucho thrash. Pero, en realidad, no han sido más que tres reseñas en 16 días, y hoy creo que va a caer otra, jajaja. A Incubus los tengo más como death metal. Parecen más, pero es simplemente porque no hay actividad. Bueno, se ve que estos últimos días se ha animado un poquito el asunto con las reseñas de Burn y Wertherr.

Pues aún me queda un poco de cuerda thrash. Ahora que lo comentas, a ver si consigo sacar adelante al menos las reseñas de More y 220 Volt, pero sigo con ganas de escuchar thrash del bueno. Es sobre lo que me apetece escribir en estos momentos

El álbum no es largo, son 39 minutos. Eso sí, bien aprovechados. Hay muchas cosas aquí metidas y todas bien hechas. La banda es muy buena técnicamente y el sonido está muy logrado. Ya me contarás que tal ese Nemesis. Es algo más futurista y menos tradicional que este, pero muy bueno igualmente. Después de estos dos, ya no los tengo muy controlados.

Muy disfrutable de principio a fin. 39 minutos muy bien aprovechados que pasan volando
A mi es que las producciones de thrash del 88 al 91 ambos años incluidos son las que más me gustan, luego ya después suenan muy ampulosas sobresaturadas. A mi me encantaría que las últimas producciones de thrash sonaran así. No se ... suena tan organico y natural

Yo también soy mucho del thrash del 89-91. Es cierto que me encanta el sonido de las grabaciones y en esos años están algunos de los trabajos que más me gustan del estilo: Coma of Souls, Rust in Peace, By Inheritance, Alice in Hell, Never, Neverland, Deception Ignored, No More Color... Yo reconozco que a mí esta versión algo más refinada y madura del thrash metal me encanta y que, en general, son álbumes que suenan tremendos. Obliveon son una banda mas underground y aquí también hay un acercamiento al death metal, pero el estándar de cada sigue siendo muy alto. Es un trabajo que siempre recomiendo a los seguidores del thrash-death más técnico. Un placer descubrírtelos, Black Rose.