Mercyless - Coloured Funeral

Enviado por Witchfyre el Sáb, 12/02/2022 - 21:16
Mercyless

¿Death metal francés? A priori no suena excesivamente prometedor, pero, si hacemos una selección cuidadosa, igual os hago cambiar de opinión. Veamos, Disincarnate (¿estaría al tanto James Murphy?) y Sublime Dementia de Loudblast, The Cube de Supuration, Final Holocaust y Enjoy the Violence de Massacra, Neverending Destiny y Towards Beyond de Agressor, Contamination Rises de No Return, más alguna cosa perdida por ahí como Catacomb… tampoco son tantos, pero ojito con el nivel que tenían estos gabachos, ya lo querría yo para nuestras tierras. Siento decir esto, pero ninguna de las bandas españolas que se aventuraron en aquellos años en el terreno discográfico, llegó siquiera a acercarse a lo que facturaban estos franchutes, por mucho que nos joda. Y, de todos ellos, si tuviese quedarme con alguno, sería seguro con Mercyless.

Formados en 1987 por un muchacho (atentos mis paisanos) de A Guarda, provincia de Pontevedra (¡manda huevos! Pequeña localidad a menos de 40 km. de mi ciudad) hijo de emigrantes gallegos, asumo, el apellido Otero ya me puso tras la pista (y seguro que detrás de lo de Max se esconde un nombre tan “glamouroso” como Maximino o algo similar). Debutar con un Abject Offerings en 1992 no parece una proeza exactamente, pero sí lo era mostrar tal nivel de profesionalidad en un país de escasa tradición deathmetalera como Francia y moverse nada menos que a los Morrisound para grabarlo (cosa que ya habían hecho antes un año antes Loudblast y No Return). Muy deudor de lo que otros como Death o Pestilence habían hecho hasta el momento, se trata de un álbum que disfruto como un ejercicio canónico de death metal con inclinaciones técnicas, bien producido y con una portada irresistible (casi sólo por ver ese Cristo de San Juan de la Cruz de Dalí por aquí merece la pena reseñarlo algún día). La de Coloured Funeral merece hacer un aparte... ¿Qué "coño" (literalmente) es eso? Al menos es lo que parece... Bueno, volviendo a Abject Offerings, se trata de algo ideal para el disfrute de los que se derritan por cualquiera de los dos antes citados y por sus primos de Gorguts (hablo de principios de los 90, por supuesto) o Cancer, pero, en el fondo, bastante falto de una personalidad propia.

Con tal motivo, me parece mucho más justo con ellos interceptarlos en el momento en que creo que realmente llegaron a brillar con luz propia con uno de los mejores álbumes de death metal fuera de los círculos habituales (Florida, Nueva York, Estocolmo, Inglaterra, Holanda…, se entiende). Un poquito tarde, 1993, y aún luciendo sus influencias bien orgullosos, no es que se aparte radicalmente del sonido de álbumes como Considered Dead y Testimony of the Ancients, pero el gallego y los tres franceses (parece que voy a contar un chiste) comenzaban con Coloured Funeral a mostrar mimbres de banda “de verdad". De esas que, con un poco más de recorrido, podría haberse sacado un verdadero as bajo la manga, sin embargo, las mareas de los 90 se los tragaron y acabaron con un desastre como C.O.L.D. en su lugar, quedando este colorido funeral como su epitafio en lo que a calidad musical se refiere.

Así, de sopetón, arranca Spiral of Flowers con un riffeo muy retorcido, un Max que vocifera a medio camino entre Martin Van Drunen y Patrick Mameli (a este tío le tienen que volver loco Pestilence, a cojones), unas letras que tiran a ocultistas e intelectualoides y geniales solos repletos de melodía (muy Testimony of the Ancients, también). Sin embargo, unas calmadas secciones con voz semilimpia parecen abrir horizontes y Mercyless apuntan en direcciones algo más ambiciosas. La cojonuda Mirrors of Melancholy arranca de nuevo desenfrenada, derrochando técnica en el riffeo (se les ve atareados a Max y a Stéphane Viard), pero un nuevo sólo melódico frena la brutalidad y los sume terrenos doomeantes próximos a unos Bolt Thrower con un Max Otero que ahora recuerda a Karl Willets. Seguramente la mejor del lote, es un carrusel de parones, acelerones, secciones cuasi brutal death, arpegios melódicos… 5 apasionantes minutos en los que tan pronto se acercan a Cannibal Corpse como a Bolt Thrower sin sonar en ningún momento incoherentes. Travel Through Strange Emotion baja el ritmo, algo más pesada y old school, rompe con una acústicas y una voz limpia para girar con vértigo hacia otra cosa. Death metal que consigue sonar familiar y personal al mismo tiempo. No es que venga con que Mercyless hacen gala de un sonido único, pero tampoco sería justo con ellos decir que en este Coloured Funeral busquen sonar como nadie en concreto, más allá de las inevitables menciones a Pestilence. Y sin ser, aún así, una copia descarada, se trata más bien de un halo general de proximidad e influencia espiritual. Y así las 9 que aquí encontramos, con la salvedad de la preciosa acústica Agrazabeth, combinando con maestría dosis de ingenio con un tradicionalismo deathmetalero, que hace sus rasgos bien reconocibles. Mercyless consiguen sonar personales y tradicionales al mismo tiempo y eso no resulta particularmente sencillo, apegados a la vieja escuela e imaginativos a partes iguales. Toda una pieza de muchos quilates para un fan del death metal que quiera escuchar algo original, sin salirse del espectro más fundamentalista.

A los controles, Colin Richardson… sonar, suena bien. Poderoso y crudo, no es su mejor trabajo, eso seguramente lo firmó junto a Carcass o Bolt Thrower, pero tampoco hay mucha queja. Sea o no cuestión de presupuesto, las guitarras tienen un tono descarnado que no le queda nada mal (algo me recuerda al Necroticism), y quizás lo único que no me termina de encandilar sea una batería cuyo sonido se atropella un pelín en las partes rápidas de doble bombo. No me ocurría en Abject Offerings, así que tampoco debería culpar al bueno de Gerald Guenzi, que ya cuajaba allí un estupendo trabajo. Tonterías mías, en realidad todo suena muy bien… Al final, todo hace que vuelva a lo que James Murphy grababa en tierras británicas con el mismo Richardson en fechas muy cercanas.

Por lo que a mí respecta, álbum súper recomendable de death metal. Especialmente dirigido para todo seguidor compulsivo de bandas como Death, Pestilence, Gorguts, Disincarnate, Cancer, Carcass, Morgoth… y aún no haya tenido suficiente con todas ellas. Recuerdan a todas al mismo tiempo y a ninguna en particular. Es bastante difícil hacerlo mejor sin haber llegado más lejos. Son cuatro cuernos tirando para arriba los que le pongo a esto. Estupendísimo death metal de altos vuelos.

8,5/10

- Max Otero: guitarras, voces
- Gérald Guenzi: batería
- Stéphane Viard: guitarra solista
- Rade Radojcic: bajo (d.e.p. 2015)

Sello
Century Media Records

Creo que me saturé de Death metal. Hubo una época en la que era lo único que escuchaba, pero hay taaaaantas bandas, y hay otros tantos estilos que me encantan, así que me es imposible abarcarlo todo. Al final me he quedado con las más afines: Bolt Thrower, Benighted, Entombed, Crytopsy y algunos más. Muy de vez en cuando me aventuro a alguna nueva. Peeero, resulta que una de mis favoritas es, como ya he dicho, los franceses Benighted, y como no conozco ninguna más de la escena francesa, le estoy dando la oportunidad a estos, gracias a la reseña. Y de momento la cosa promete. Promete bastante, diría, pues mientras escribo esto voy por la mitad y se me ha pasado volando. Buena señal. Ciertamente no es la banda con más personalidad de la escena, pero tiene detalles que me gustan, y no me están aburriendo en ningún momento. Saludos!

No los conozco más que de nombre, pero no creo que sean santo de mi devoción, ya que veo que lo suyo es el brutal death, un estilo que no me atrae mucho. Para mí el death metal, cuando pierde de vista aspectos como la atmósfera, la técnica, la melodía o aquellas cosas que lo hacen más agradable a mis oídos y se concentra en la brutalidad, pierde toda la gracia. A mí el death metal clásico de principios de los 90 es el que más me gusta y Mercyless, sin bien es cierto que no son muy originales, son una amalgama de las bandas que más escucho en este estilo. Y tienen su toque personal, ojo. Son bastante técnicos, meten buenas melodías y algunos detalles menos convencionales. Eso sí, van a ser muy interesantes para todo seguidor de Pestilence, Gorguts, Death, Bolt Thrower, Carcass, Cancer, Morgoth y demás bandas de este estilo del período 90-93.

Bueno, si no te atrae el Brutal Death es posible que no lo haga Benighted. Pero ten en cuenta que son una banda muy variada dentro del estilo. No es la típica banda de Brutal Death machacona y cerrada en ese estilo, diría que son bastante eclécticos (dentro del estilo, tampoco esperes movidas experimentales), tocan más palos como el Grindcore y no andan ausentes de melodía, técnica, ni nada de eso. En sus inicios (más concretamente en los dos primeros álbum), incluso estaban fuertemente influenciados por el Black metal, pero no es una etapa que tenga muy controlada porque no es un estilo que me atraiga.

No quiero ser el pesado de las recomendaciones xD pero Benighted lo merece. Si les das la oportunidad, diría que Icon es un muy buen puto de partida, puesto que me parece el mejor. Un saludo Witchy, siento haber desvirtuado un poco, pero solo le he dado dos escuchas al álbum de la reseña y siento que no puedo aportar nada que no hayas expuesto tu en la reseña. Buen aporte de Death Metal para el portal. Un saludo.

Para mí esto no vale tío. Puedo llegar a tolerar algo de brutalidad bien dosificada. Me gustan en cierta medida bandas clásicas tirando a brutas como Sinister, Suffocation, Cannibal Corpse, Deicide... siempre y cuando aporten algo más. Cierta musicalidad, atmósfera... Fue ponerme un tema, entiendo, que del último álbum de estos fulanos en YouTube (colaboraba un tío de Fleshgod Apocalypse) y quitarlo 10 segundos después de empezar a sonar. Yo es que es entrar ese blast-beat desquiciado con el sonido actual y perder totalmente el interés. No le veo sentido s tocar ritmos a 270 bpm, nunca se lo he visto. Nada tío, ni lo intentes, que a mí estas movidas no me van nada de nada. Y el grind menos todavía. Yo soy de death old school, me van las viejas bandas suecas, finlandesas, americanas... pero todo este rollo brutal death moderno no me interesa en absoluto. Lo has intentado al menos... Un saludo.

El brutal death y yo nunca nos hemos llevado muy bien y menos con este corte tan moderno. Aún puedo escuchar los discos clásicos de Cannibal Corpse y Suffocation, que no son tan animales, pero estas cosas a mi ya no me dicen absolutamente nada. Es un derroche de técnica y brutalidad que no comprendo ni aprecio. Y el grind, es que no me gusta ya ni en su inicio. Los años grind de bandas como Carcass o Napalm Death tampoco me parecen interesantes y no es hasta que se movieron hacia el death metal que me empiezan a gustar.

Es curioso porque precisamente esas dos bandas que comentas, me parecen más brutas que Benighted. Los Suffocation me molan, aunque costó un poco "domarlos" dadas las estructuras que manejan a veces, y lo asfixiante de su sonido. Con los Cannibal Corpse lo he intentado varias veces pero no me han terminado de llenar nunca, precisamente porque ya había escuchado antes otras bandas que practican el mismo estilo y me gustan más ( los propios Suffocation, además de Crytopsy y, aunque sea en parte, Benighted), y porque no me convence del todo la voz de Barnes. Aunque es evidente la influencia de la banda, en los propios Benighted de hecho, por ejemplo, como en tantas otras bandas del género. Género (el brutal Death) en el que tampoco me recreo demasiado, la verdad. Las 3 bandas que he mencionado son las únicas que tengo en altísima estima, y apenas he sentido la necesidad de buscar más en él. Cuando lo he intenté con Aborted, por ejemplo, me pasó más o menos lo mismo que con Cannibal Corpse, que no me disgustaba, pero me faltaba algo.
Quizá mi gusto por los Benighted venga porque me gusta el invento de mezclar el Grindcore con Brutal Death y crear un híbrido extremo chungo xD Tampoco era yo de Grindcore antes, pero hace años que adoro a los Napalm Death (con los que empecé con la etapa Death Metal) y desde hace unos meses he descubierto que también me encantan otras bandas del género.

En fin, entiendo entonces que la combinación del sonido moderno, Brutal Death y los ramalazos Grindcore son lo que te echa para atrás. Lo tendré en cuenta por si en el futuro me surge otra recomendación. Saludos.