
1. Dementia
2. Shadow In The Black
3. Divine Victim
4. Hammer Of The Witches
5. Morbid Tabernacle
6. Isle Of The Dead
7. Taken By Storm
8. The Deluge
9. Friction In Mass
10. Rest In Pieces
Todos conocemos la historia de Atlantis. Una bella ciudad que reinaba en el mundo muchísimo antes de que las grandes civilizaciones que conocemos hubieran salido siquiera del neolítico, y cuyo poder haría temblar a la mayoría de reinos imbatibles que aparecerían más adelante. Sin embargo, como relató Platón en su magnífica tragedia griega, la ciudad quedaría relegada al olvido, puesto que Poseidón la condenó a ser engullida por las terribles fauces del océano tras un fuerte diluvio.
El tema de Atlantis fue el que escogieron Manilla Road para el que fue su quinto disco, y la verdad es que no podría haber sido más irónico. Y digo que es irónico porque los de Shelton fueron una banda abanderada dentro de su estilo, con un talento compositivo desbordante y una personalidad marcadísima (¿o acaso alguien no sabría reconocer la voz nasal de Mark con tan solo dos segundos de escucha?). Este talento lo marcaron para siempre en obras que los seguidores del heavy metal de vertiente épica veneramos, como es el caso de Open The Gates, el clásico Crystal Logic o el disco que hoy nos atañe, The Deluge. Sin embargo, pese a ser un grupo con todas estas cualidades en su haber y creador de discos atemporales, Manilla Road fueron “sumergidos” injustamente en el olvido, quedando relegados a grupo de segunda división para el resto de su existencia.
La evolución de Manilla Road también es algo para enmarcar. Comenzaron con un estilo cercano al rock psicodélico, muy influenciado por bandas como Hawkind, para más tarde pasar a su característico sonido heavy en Crystal Logic, el cual es para muchos su mejor disco, y finalmente conjugaron esos elementos de heavy metal clásico con otros propios de la reciente oleada de thrash metal (de hecho, Mark Shelton comentó en más de una ocasión que Metallica fue un grupo que le influenció fuertemente y que hizo que su visión a la hora de crear música cambiara). Y de este modo, en tan solo cinco años habían pasado de un tema de rock con tintes psicodélicos como lo es “Queen Of The Black Coast” a una bestia parda como lo es “Dementia”.
Además, este acercamiento progresivo hacia tonalidades más oscuras y agresivas se vio acentuado cuando Randy Foxe entró a la banda para grabar el anterior Open The Gates. Randy fue uno de los motivos para este endurecimiento de la música de Manilla Road, ya que su estilo muchísimo más agresivo y rápido de tocar la batería obligó al resto de la banda a subir las revoluciones. Y es que si le llaman Randy "Thrasher" Foxe será por algo.
The Deluge está compuesto por ocho temas y dos interludios, entre los que encontramos un poco de todo lo que caracteriza a la banda. Temas como “Dementia”, “Isle Of The Dead” y “Taken By Storm” son los encargados de mostrar las nuevas tesituras por las que pretende andar el grupo. Son rápidas, oscuras, potentes y breves, todo lo necesario para crear un tema de thrash de la vieja escuela. La batería con la que abre “Dementia” es, valga la redundancia, demente. Además, Sheldon decide aporrearnos con unos alaridos salidos del mismo infierno, que hacen que el tema suene más agresivo aún si cabe. Las otras dos canciones presentan un estilo similar a esta, pero sin duda “Dementia” es la mejor de la trilogía. Eso sí, si bien cabe destacar que en estos temas se puede apreciar un gran acercamiento hacia el thrash metal, tampoco pueden llegar a ser consideradas del todo dentro de este estilo, ya que tienen una personalidad Manilla muy fuerte, y Manilla es sinónimo de heavy metal épico.
“Shadow In The Black” se introduce con unos lúgubres arpegios de guitarra, los cuales se complementan de maravilla con la melodiosa voz de Mark. No obstante, esto es tan solo la calma antes de la tormenta, y enseguida vuelven a arremeternos con la caballería pesada subiendo los decibelios y las revoluciones. Por otro lado, “Divine victim” se presenta como el tema más accesible del álbum, y también como uno de los mejores. El tema posee un cabalgar de guitarras que podría recordar a los tiempos clásicos de Maiden, y un estribillo de esos que quedan grabados a fuego en la memoria. Tema imprescindible dentro de su discografía. “Hammer Of The Witches” por su parte nos sumerge otra vez en la oscuridad más absoluta, pero en esta ocasión de una forma más pesada y lenta. De nuevo nos encontramos ante un riff y un estribillo dignos de museo en otro de los temas que jamás falta en sus conciertos.
En la recta final del disco es donde las cosas terminan por alcanzar unas cuotas de calidad increíbles, y es que los dos mejores temas, “The Deluge” y “Friction In Mass”, son los encargados de cerrar la obra. En “The Deluge” se narra la ya mentada tragedia griega, comenzando con una parte en limpio que parte el alma y rematando con una avalancha de riffs y de solos que parecen no terminar jamás (y ojalá no lo hicieran). Una cosa muy curiosa del modo de tocar la guitarra de Mark Shelton (y que se puede apreciar de maravilla en esta canción) es que parece que prefiere improvisar sus solos a hacerlos súper elaborados. No obstante, y pese a lo que pudiera parecer, siempre están cargados de pasión, melodía y una fiereza que ya quisieran muchos nombres conocidos para sí.
“Friction In Mass” es, a mí parecer, el mejor tema del disco. La fiereza y velocidad se unen a las excelentes melodías vocales para crear un tema memorable, capaz de no pasar desapercibido pese a estar rodeado de titanes como “Hammer Of The Witches” o “The Deluge”. Además, siempre me ha parecido que está conectado con la maravillosa portada, ya que la potencia de los riffs me hace pensar en la fiereza sobre el lienzo de las pinceladas que fueron necesarias para crear un cuadro con tanto poder expresivo.
En definitiva, The Deluge es el último gran álbum de Manilla Road, porque los siguientes pese a estar a un gran nivel también no pueden siquiera acercarse a la trilogía compuesta por Crystal Logic, Open The Gates y The Deluge. Para la mayoría de gente el culmen de su carrera es el citado Crystal Logic, pero yo personalmente me quedo con este The Deluge, al que le tengo un cariño especial, el cual no se si será realmente merecido, o simplemente un producto de los bonitos recuerdos que tengo junto a él.
Como dirían Manilla Road: ¡Up The Hammers And Down The Nails!
Mark "The Shark" Shelton: Guitarra y voz
Scott "Scooter" Park: Bajo
Randy "Thrasher" Foxe: Batería