Gorefest - Erase

Enviado por Hawkmoon el Mar, 22/11/2011 - 21:45
2112

1. Low
2. Erase
3. I Walk My Way
4. Fear
5. Seeds of Hate
6. Peace of Paper
7. Goddess in Black
8. To Hell and Back

Gorefest, los titanes del Death holandés, y que tan buen sabor de boca no dejaron a los amantes de lo extremo con discazos del calibre de "Mindloss", "False" y "The Eindhoven Insanity" (considerado uno de los mejores discos de Death Metal en vivo de todos los tiempos. Además, carga con el rollete de ser, teoricamente, el primer "Live" netamente Death), tenían todo a su favor para convertirse en uno de los grandes nombres del reino cañero y salvaje. Todo.

Dos discos bastaron para poner su nombre en el mapa. Y qué dos discos, señores. Ahora, el momento de la verdad. El tercer trabajo. Lo que decide tu futuro. El disco que debe, por regla natural, y viendo el pasado de un número incontable de bandas a las que sigo, cambiar las cosas, y para mejor. Si el tercer paso no supera al segundo, colega, la has cagado. Es una ley no escrita en nuestro feudo. Allí están "Master of Puppets", "Reign in Blood", "Beneath the Remains", "Covenant" o " Among The Living". Demostrando que "el tercer retoño" suele ser el más guapetón. O, como poco, el que te resume y define. Aunque no sea certero realmente.

Resumen: O le pones los cojones por corbata a la gente en tu tercer disparo o, muchacho, recoje tu mierda, tus maletas y abandona el edificio. Vuelves a casa, con mami y papi. Se acabó ser un rockstar. Así de duras son las cosas aquí. Hay mucha gente, muchos nombres, y muy poco tiempo para perder.

Gorefest tienen dos etapas bien diferenciadas. Una, la primera, es la que comprende los dos primeros discos, cargada de buen tonelaje abrasivo y cañero. La segunda, la que trajo polémica, diatribas de los más irredentos seguidores, es la que nace con el disco que nos ocupa. "Erase" es un disco puente entre lo que hacían los holandeses y lo que iban a hacer a partir del momento. Groove y Death, además de una buena ración de Death n' Roll. Eso nos espera, ahora, al darle cera al combo de Jan-Chris. Algo que a partir del siguiente disco, "Soul Survivor", iba a ser aún más palpable.

Gorefest quisieron abarcar más público. Tal y como hicieron, y con infinitos mejores resultados, Entombed. La cosa no es que les saliese mal, para nada, pero si la comparamos con los discos pasados, uffff, digamos que no quedaremos tan atolondrados y maltrechos como antes. En su búsqueda del éxito, del poder vivir, y bien, del negociete musical, Gorefest se olvidan de algo importantísimo: Eran una banda de Death Metal. No me jodas. No puedes pasar de parir obras que huelen a puro azufre a querer tener un "Load" (disco que aún no habia visto la luz del Sol) oscurote y pegador. El cambio se acusa. Y más en el seguidor, en el tio que se deja la pasta buscando a unos nuevos Morbid Angel o a unos nuevos Death en el horizonte.

"Low", el primer tema, y que nada tiene que ver con aquel temazo, y disco, de Testament de 1994 (aunque trata de sonar igual de chulesco, y en vano), nace amparado por un caluroso bajo, "groovie" como la madre que lo parió, y con un caminar, aunque riffero, privado totalmente de poder. Almenos del poder al que nos habían acostumbrado los soldados del reino de los tulipanes en sus anteriores visitas al equipo de música. Se nota que Pantera andaban en la cúspide, pues el tipo de producción, me parece a mi, no es producto de la mera casualidad. Un poso melódico, nacido de unas cuerdas arabescas, le pone algo de sal al invento. La cosa me recuerda a unos Obituary cansadetes, como atrapados en lodo, no avanzando todo lo rápido que quieren. Atrapados. Death-Groove vaciloncete. Poco más.

"Erase" (de la que sospecho que Vader han tomado "prestado" algo de cara a sus obras a partir del 2000), "I Walk My Way" (White Zombie + Gorefest, todo en uno), "Fear" (con un inicio prometedor, acabamos, finalmente, zarandeando el cabezón casi por inercia, por hacer algo) y "Seeds of Hate", todas con una cadencia muy similar, nacidas del mismo padre y la misma madre, cumplen con la labor de entretener, de entregar material con cierto estilo, levemente vanguardista y con un toque ecléctico (sobretodo por el áspero sonido de la obra), casposo, sucio, arenoso. Gorefest siguen siendo una banda oscura, cañerilla...pero, leches, se nos han apalancado cosa fina. No suenan con cojones. Y, de repaso, suenan a híbrido entre un Doom poco esmerado, los Obituary más decadentes, un rollete soso a lo Entombed (cuando fueron de garajeros) y como, queriendo, y no logrando, jugar en una línea a lo Pantera, Fear Factory o Sepultura. Uffff, sueños inalcanzables, Jan-Chris. Y menos con un disco que, armado de técnica y cierto carisma, queda cojo, débil, pequeño de cojones frente a sus hermanos del 91 y del 92. Como disco, pse, pse...no está mal. Headbanging aseguradote. Con margen de error, claro, que no te conozco mucho. Como "continuador de leyendas", jejejeje, malote. Flojote.

"Peace of Paper" levanta los ánimos y se pone marrullera. Mola, coñes. Ya nos tocaba experimentar un poquito de dolor. Sangre en las encias, dolor de cervicales y un guitarreo, seco y cortante, poco orgánico pero matador, a lo bisturí, se clava en el coco y hace que te entregues a mover el esqueleto. Simpleza. Sí. Pero martilleante. Como se agradece escuchar una batería a toda leña después de la calurosa travesía desértica que han sido los cinco primeros tracks. El parecido con Vader me vuelve a la mente. Pero Gorefest, buscando el aplauso, y la pasta, suenan más brillantes, con más luz. Como buenos nenes.

(Las "groovie-repetitivas") "Goddes in Black" y "To Hell and Back" ponen el punto y final a la entrega de 1994 por parte de Gorefest. "To Hell and Back" entrega un buen tema, sin duda. Potentorro y sólido, simplón, incluso infantil en la construcción, pero nada carente de gracia y con una melodia de guitarra realmente conseguida. Un cierre majete a un disco que, contando de dónde venía, debería de haber entrega mierda de muchísimo más nivel.

3 cuernos (bajotes) para "Erase". Sí, mejor. Muchachos, deberíais haber "borrado" el disco en estudio y lanzaros, de verdad, a la yugular de los fans. Una pena.

Aún asi, rescatable. Para "Gorefestianos" de pro y amantes de la caña sosegada. Bastante sosegada.

Jan-Chris de Koeijer: Voz y bajo
Frank Harthoorn: Guitarra
Boudewijn Bonebakker: Guitarra
Ed Warby: Batería

Sello
Nuclear Blast