The Donnas - Spend the Night

El mundo del Rock es muy amplio, por lo que hay espacio para todos. Y entre tanto machos y no tan machos, pero hombres al fin y al cabo, terminan por aparecer agrupaciones femeninas dispuestas a darlo todo. Y no sólo una frontman (¿o frontwoman?) mujer, a lo Arch Enemy o Epica, sino a un verdadero escuadrón de nenas que están listas para rockear y dejarnos aturdidos.

Las Donnas (Brett Anderson, Allison Robertson, Maya Ford y Torry Castellano) empezaron a mediados de los 90 con un proyecto musical de preparatoria, cuando apenas eran adolescentes. Con 15 años y 16 años, las cuatro chicas sólo se concentraron en versionar canciones de Ramones (su máxima influencia) y bandas femeninas tipo Bikini Kill y The Runaways.

El tiempo pasó y estas chicas comenzaron a tomar esas influencias para producir su sonido propio, buscar su identidad por medio de una renovada actitud musical. Pero, al estar demasiado metidas con estas bandas mencionadas, tanto su debut, The Donnas (1997) y American Teenage Rock 'n' Roll Machine (1998), sin ser malos discos, dejaban en evidencia el origen de estas chicas. Estaban comenzando a salir del capullo.

Ambos discos con mucha esencia gareja, Punk melódico y Rock ‘n’ Roll pusieron a estas chicas en el mapa, logrando que obtuvieran cierto reconocimiento, pero apenas era el inicio. The Donnas iba empezando poco a poco, todavía faltaba que se concentraran más y lograran sacar ese poder que llevaban por dentro. Y, de hecho, con American Teenage Rock 'n' Roll Machine uno ya vislumbra a cuatro adolescentes transformándose en mujeres jóvenes con un potencial tremendo.

Tuvieron que pasar otros dos discos, Get Skintight (1999) y Turn 21 (2001) para que las Donnas fueran evolucionando a punta de temazos y endurecimiento continuo hacia un Hard Rock de reminiscencia ochentera pero con garra Punk. Y es cuando nace Spend the Night, el disco insignia de estas chicas.

Nunca cometan el error de juzgar a estas chicas por encima, porque, repito, es un terrible resbalón. Primero, si piensas que son el típico grupo de mujeres que hacen críticas del machismo, luchan por la igualdad de género o buscan atención por medio del Rock, estás muy equivocado, colega. Las Donnas son… muy “Donnas”, por decirlo del algún modo. Lujuriosas, deseosas de fiestas, rebeldía, cervezas, locura y chicos sexys, evidentemente. Estas mujeres son tan descaradas y “sucias” a su modo que dejan a Mötley Crüe, Def Leppard, Bon Jovi, Ratt y cualquier banda Glam por el suelo. The Donnas no son ningunas damas, y con su música se expresan abiertamente.

Spend the Night es su disco emblema precisamente por ser la recopilación de toda su personalidad y un acelerón bien poderoso. Siempre fueron obscenas y libidinosas, pero aquí cualquier forma de contemplación carnal y rocanrolera es aumentada a propulsión de chorro de agua hirviendo. Las chicas no sólo querían diversión, sino destruir la habitación y no a punta de almohadazos, precisamente.

Todo en este disco está maximizado y potenciado de una manera impresionante. Primero, con la portada ya nos vamos dejando de tonterías y comprendemos que lo que viene nos hará tragar profundamente. Las Donnas siempre me han parecido chicas atractivas, las cuatro, pero en American Teenage Rock 'n' Roll Machine apenas eran unas adolescentes llenas de barros, cabello sucio, ropa de segunda mano y maquillaje barato. Tenían esa imagen de adolescente de un barrio en proceso de gentrificación, pero cuando ves la portada de Spend the Night, sólo te queda abrir la boca y contemplar que estas cuatro nenas no son ni la sombra de lo que fueron. Las cuatro ultra repotenciadas y con muchas ganas de más.

Spend the Night (“Pasar la noche”, aunque no sé haciendo qué cosas…) es un trabajo impecable. Mucha guitarra con riffs hardrockeros, vocalización más prensada, gran producción, solos excelentes y coros muy memorables. A diferencia de sus discos anteriores, Spend the Night es un empujón tremendo y su disco más duro, todavía con esos elementos Alternative, Punk y Pop, pero con bastante Hard Rock y un sonido que recuerda mucho a álbumes como Girls, Girls, Girls y Pyromania (combinación perfecta: chicas a la que le encanta "hacer arder", jejejeje).

Esperar la panacea musical con este disco es muy vago, puesto que si conocemos a las Donnas sabemos de qué va su rollo. Eso sí, nada comparable a lo hecho antes. Quizás quedan algunas trazas de riffs tipo Ramones y base rítmica que recuerda a The Runaways, pero Spend the Night trae mucha potencia, mayor velocidad y condecoran a estas chicas con un muy buen trabajo. 13 cortes geniales y con los que puedes pasar un rato muy disfrutable. Este es uno de esos trabajos que tienes que poner en el auto mientras vas por la carretera, porque hay pura adrenalina.

La duración de las canciones es clara y nos lo indica todo: riffs sobresalientes, estribillos coreables, solos sublimes, adrenalina, mucha lascivia y 0 temas de medio-tiempo. Cada canción es un elemento destinado a hacer el disco lo más aceptable y concreto posible. Trece cortes para cuarenta minutos porque tenemos aquí las canciones de tres minutos que ya todos sabemos qué son: gancheras y atractivas.

Y, lo vuelvo a decir, aquí el contenido lírico deja como imbéciles y gilipollas a toda la oleada Glam de los ochenta. Sexo ocasional en todas partes, ninfomanía, lujuria, fiestas exageradas, vicios, excesos, relaciones sexuales duras y también muchísimo humor. The Donnas es esa banda que hace pensar que no todas las mujeres son precisamente damiselas esperando por su príncipe azul. Las Donnas son incluso más “machos” que mucho Poison en su apogeo. Y es que lo hacen con ganas; esta es su manera de lanzarse a la vida y darles una lección a todos. Cuatro chicas que tocan bastante bien sus instrumentos y hablan sobre pasarla bien en una caliente noche de verano. Ya calzan casi los 40, ¡pero estoy hablando de un disco de hace 16 años! Todavía no era el tiempo de las responsabilidades, eran los días de cuarenta chicos en cuarenta noches.

It's on the Rocks empieza espectacular, demostrándonos a esas Donnas sensacionales que hacen poner de cabeza al mundo. Luego dándole paso al tema central del álbum: Take It Off. Una canción increíblemente enérgica, un riff para hacer mucho headbanging y con una letra de esas que te hacen pensar “Vaya chicas más decentes…”, pero, ¡qué coño! Temazo de primer nivel, solo mágico por parte de la hermosa Allison Robertson y sus manos que Satán se las bendiga. Definitivamente una guitarrista muy buena, en todo sentido.

Who Invited You es puro Hard Rock melódico coreable de primera y todo lo que viene va por la misma línea. Todos los temas tienen gancho, velocidad, fiereza, sexualidad (que no “sensualidad”, precisamente... no se confundan) y pasión por todos lados. Dirty Denim, Pass It Around, la inmoral Too Bad About Your Girl, Take Me to the Backseat y la super canción que nos habla de lo que pasó “después del comienzo de la fiesta”: 5 O'Clock in the Morning.

Spend the Night, de alguna manera, es como un disco conceptual: cada canción habla de algo que pasó en una noche increíblemente espectacular. Y si no es por esta reseña, creo que nunca lo hubiese visto así, pero todo se vuelve demasiado evidente. Básicamente empieza con Quítatelo y termina con 5 en punto de la mañana. ¡Ayayay! ¿Qué habrá pasado a través del transcurso de este disco? ¡Se los dejo a su imaginación! Claro, ojeen las letras, son bastante obscenas y mujeriegas, irónicamente.

Spend the Night es un disco bastante soez, cargado de buenos temas y mucha garra con mucha melodía de por medio. Un álbum bastante recomendable y probablemente lo mejor que ha manufacturado the Donnas junto a Bitchin’ (¡que su nombre sea su condena!). Hay demasiado de dónde tomar y cada canción encanta a su modo. Claro, los singles como Take It Off y Who Invited You son los obvios platos fuertes, pero, ¡es que ambos son grandes temas! Especialmente Take It Off. Canción que no puedes olvidar nunca y es muy indicada para estar con tu novia abrazados fuertemente.

En fin, muchos ingredientes, a unas Donnas que arden y echan fuego, Hard Rock bien dotado y bastante calidad. No lo dejes pasar, amigo. No pienses si son chicas o que si el género no te va o que si es post-2000, etc. Spend the Night es un disco que vale la pena, y mucho.

Take it off! Take it off, Baby, for me!