
1. Overlord
2. Parade of the Dead
3. Riders of the Damned
4. Darkest Days
5. Junior's Eyes
6. Helpless
7. Bridge Over Troubled Water
8. Can't Find My Way Home
9. Darkest Days (John Rich version)
10. The First Noel
A nadie se le escapa que Zakk Wylde sea uno de los más reputados guitarristas del feudo metálico. Ya sea por su larga colaboración con el 'Madman' o con su propia banda, Black Label Society, este icónico guitarrista de Nueva Jersey ha alcanzado un merecido estátus de celebridad y reputado músico. Más allá de las correspondientes opiniones sobre su música, lo cierto y verdad es que Zakk, al contrario que muchos contemporáneos y músicos del género, se caracteriza por un variado gusto y vocabulario musical. Desde los habituales e imaginables Led Zeppelin y Black Sabbath, pasando por Tom Petty, hasta llegar a compositores brillantes como Elton John, son algunos de los artistas cuya obra parece encontrar ecos en la del veterano guitarrista.
No fueron pocos los que se sorprendieron cuando, en 2011, Zakk presentó al mundo el nuevo retoño de Black Label Society: The Song Remains Not the Same. Un proyecto netamente intimista que presentaba algunas de las canciones del anterior Order of the Black, junto a un grupo selecto de versiones de otros artistas, en formato acústico. Una propuesta algo arriesgada, pero dada la efectividad de baladas anteriores como 'In This River', y dado que Zakk parece haber heredado la habilidad vocal de Ozzy para las canciones melancólicas, el proyecto debería resultar cuanto menos interesante. Y más aún cuando los artistas versionados son de la talla de Simon & Garfunkel o Crosby, Stills, Nash & Young. Sorprendente, ¿cierto?
Como tal, The Song Remains Not the Same no puede compararse con cualquier otro disco de la misma banda. Pero si uno lo considera como un EP, o como un proyecto aparte, puede encontrarle mucho más encanto. Aquí no van a encontrar riffs descomunales y canciones aceleradas, sino un sobrio y notable trabajo de arreglos por parte de Zakk, infundiendo savia nueva y una visión distinta a canciones ya conocidas. El protagonismo absoluto del disco recae en la melancólica voz de Zakk, su guitarra, y por supuesto, el omnipresente piano, indispensable para un trabajo de este calibre.
Los seguidores de Black Label Society se sorprenderán - en cualquier sentido de la palabra - de la transformación de las canciones de Order of the Black. 'Overlord' se transforma en un ejercicio country, en la onda de 'Blood is Thicker than Water' (Shot to Hell, 2006), pero aún manteniendo la fuerza de la original. Pero tampoco teman demasiado: Zakk no se aleja de la guitarra eléctrica por completo. No tiene tanta importancia, pero todavía es capaz de volarnos los sesos a todos con sus infernales interpretaciones, como en el cover de los Blind Faith de Steve Winwood, 'Can't Find My Way Home'.
Sorprende también la belleza de la infravalorada 'Junior's Eyes', la preciosa y sentida balada de Ozzy Osbourne dedicada a su difunto padre. Nuevamente, creo que el largo tiempo que Zakk pasó junto al Blizzard of Ozz, le influyó tanto, que ha heredado su mismo estilo nasal y sombrío para las baladas. Los arreglos orquestrales ayudan a dotar de una mayor tristeza a un tema, ya de por sí, trágico, y por momentos parece que quien canta no es otro que el propio Ozzy. Toda una acertada elección, como sucede igualmente con el célebre 'Helpless' de los CSNY. Si bien esta carece completamente de la mágica harmonía vocal de la original - algo difícil de igualar, dicho sea de paso - emerge ciertamente victoriosa gracias al piano de Zakk.
No sucede así con otras canciones, 'Darkest Days' aparece dos veces en el disco con apenas cambios entre ambas, a excepción, claro, de la aparición vocal del artista country John Rich. Nada especialmente destacable, ciertamente. Igualmente sucede con la versión de la legendaria 'Bridge Over Troubled Water', que carece cualquier atisbo de fuerza de la original o del talento vocal de Art Garfunkel. Simplemente, y pese a ser una buena versión, esta canción no está hecha para el rango vocal de Zakk Wylde.
Sin ser un completo acierto, y aún a sabiendas de sus fallos, The Song Remains Not the Same es un curioso aderezo en la discografía de los americanos. A menudo, quizás por mis preferencias musicales, me encuentro rescatándolo con frecuencia por encima de cualquier otro disco de Black Label Society. Quizás los aficionados a la banda no les merezca la curiosidad, pero, para todos aquellos que sientan el suficiente interés, no debería decepcionarlos. Es un disco sincero, lleno de cuidados y preciosos arreglos, que brindan una nueva perspectiva a canciones viejas y no tan viejas. Si algo podemos asegurar es que, en este trabajo, al contrario de lo que decían Led Zeppelin, 'las canciones no siguen siendo las mismas...
Zakk Wylde: Voz, guitarras, piano
John DeServio: Bajo, coros
Will Hunt: Batería
John Rich: Cantante invitado en 'Darkest Days