Avulsed - Stawbound Orgasm

Si hace unos días aprovechaba la reseña de los gallegos Absorbed, para explicar lo difícil que siempre lo han tenido las bandas extremas españolas para darse a conocer en su propio país, lo de los madrileños Avulsed es directamente de juzgado de guardia. La prueba evidente la tienes aquí mismo, no hace falta que sigas buscando. Más de cuatro mil quinientas reseñas publicadas, que se dice pronto, mil y un discos de Death Metal reseñados, desde maquetas sacadas de debajo de un fiordo noruego hasta las novedades deathmetaleras más actuales, y ninguno de los reseñistas que solemos pulular por estos lares ha tenido la decencia de traer a esta pedazo de banda por aquí (yo incluido, mea culpa también).

Y ¿porqué?, pues porque en España somos así de guapos, nos fascina lo que viene de fuera, idolatramos auténticas mediocridades solo porque provienen de tierras extranjeras y somos incapaces de valorar lo que tenemos aquí. No voy a ser yo quien os de una lección de patriotismo, pues mi filosofía es totalmente la contraria, “ciudadano del mundo” como dicen algunos. Pero luego resulta que cuando Nadal juega contra Djokovic deseas que el de Manacor haga morder el polvo al serbio. Has disfrutado como un loco viendo cómo las selecciones de baloncesto y fútbol apabullaban a sus rivales en estos últimos años, y diste un salto del sofá que te diste con la cabeza en el techo cuando Gasol metió aquel pedazo de mate en toda la jeta de Kevin Garnett en su primer año de rookie en la NBA.

Pero cuando hablamos de metal, balones fuera. Es comprensible, en cuanto a metal jamás fuimos pioneros en nada (bueno sí en rock “borrachuzo-yonkarras” con Extremoduro, pero eso mejor no explicarlo). Pero joder, no somos tontos, y también sabemos asimilar las influencias que nos vienen de fuera y canalizarlas en forma de buen metal. Y remarco influenciarse-canalizar-expresar, nada de copias burdas como hacen los chinos. Avulsed serían sin duda un gran ejemplo para entender esto, pues aun siendo practicantes de un género en ocasiones tan estereotipado cómo es el del Death Metal, han sabido encontrar su propio sonido, y a los pocos segundos de escuchar uno de sus temas uno ya sabe ante quien se encuentra, y eso, a día de hoy, ya es mucho decir.

Como líder indiscutible del proyecto tenemos al vocalista Dave Rotten, conocido también por haber sido el dueño del sello discográfico Repulse Records y actualmente de Extreme Music. Un tipo que lleva un montón de años en la brecha y que se conoce la movida extrema nacional como nadie. Siempre apostando por formaciones que, al igual que sus propios Avulsed, no pueden vivir de la música ni de coña, pero que sienten tal pasión por el Death Metal que solo por eso ya merecen una oportunidad.

Como carta de presentación de los madrileños en el portal he escogido el que para mí es su mejor trabajo hasta la fecha, o como mínimo su trabajo más adictivo. “Stabwound Orgasm” aparece en 1999, justo cuando el Death Melódico alcanzaba su mayor momento de popularidad, con el “Burning Bridges” de Arch Enemy, el “Hatebreeder” de Children of Bodom y el “Colony” de In Flames como principales discos de referencia. Y el porqué os menciono estos tres trabajos en particular lo entenderéis en cuanto os pongáis a escuchar este demoledor trabajo. ¿Alguna vez te has preguntado qué sucedería si mezcláramos en un solo disco la burrería de Suffocation, con las melodías pegadizas y potentorras de las tres formaciones mencionadas más arriba? Pues ahí lo llevas, esta es la mejor manera de presentarte de inicio este “Stawbound Orgasm”, para que te vayas haciendo una idea.

Y quién mejor para plasmar este collage de brutalidad y melodía que toda una institución del metal extremo, hablamos del fenomenal guitarrista James Murphy (Obituary, Testament, Death), y que hizo un sensacional trabajo en su Sound Temple Studios. Consiguiendo dotar al disco de un sonido denso y abrasivo, pero haciendo brillar a la vez las inspiradas melodías de las guitarras de Juancar y Cabra, ambos miembros de Avulsed prácticamente desde sus inicios.

Así que disponte a ser machacado por una tormenta de entrañas y vísceras adornadas con melodías de auténtico vicio. Has leído bien, entrañas y vísceras, la temática de Avulsed siempre ha estado enfocada el gore puro y duro, un género que al que hoy escribe no le entusiasma lo más mínimo, pero tiene que haber espacio para todo en el universo metálico. Además no creo que hablar sobre Torquemada, dragones y princesas o la conexión espiritual del ser humano con la naturaleza quedase demasiado acorde con el torbellino sonoro de estos tipos, y en especial con el profundísimo growl de Rotten, ríete tú de Frank Mullen de Suffocation, que por ahí van los tiros.

El disco arranca con la breve intro instrumental “Amidst the Macabre”, que dejará descolocado a más de uno, densa y profunda a la vez que fresca y revitalizante, incluso con cierto toque sinfónico, una antesala perfecta para el primer trallazo del plástico. La homónima “Satwbound Orgasm” ataca rabiosa y acelerada, con Furni martilleando furiosamente el doble bombo y Rotten rugiendo cual bestia infernal. Un buen corte, puro Death cruje-huesos, pero la verdadera sorpresa llegará sobretodo de la mano de los dos siguientes cortes.

“Blessed by Gore” y “Compulsive Hater” trabajan ambas sobre unos riffs iniciales de puro Death Melódico que actuarán como hilo conductor durante los dos temas y a los cuales se les irán añadiendo paulatinamente el resto de artimañas deathers. Me quedo sobretodo con el minuto 3:07 de “Bleesed by Gore”, cuando después de escuchar en repetidas ocasiones el estribillo, la batería de Furni corta con un sencillo pero efectivo redoble y da paso a una dinámica cabalgada de doble bombo sobre la que brillan las guitarras de los dos hachas. En cuanto a “Compulsive Hater” solo decir que con un riff inicial de ese nivel ya tienes tres cuartas partes del tema salvado, y si luego eres capaz de cortar e intercalar un interludio mega bestia pues apaga y vámonos, temazo completo donde los haya.

Del resto de temas os recomiendo la tralla de “Eminence in Putrescence”, tema que curiosamente se titula como su anterior disco y “Nice Rotting Eyes”, la pegadiza “Homeless Necrophile” muy en la onda de los dos temas mencionados en el párrafo anterior, la machacona “Skinless” con unas guitarras que destilan cierto tufo a Dimebag Darrell, el tema cierre “Virtual Massacre” con unos redoble de inicio que nos recuerdan vagamente a la inmortal “Refuse/Resist” de Sepultura…Joder! Es que no puedo recomendaros un solo tema en especial porque todos son cojonudos de verdad.

Eso sí, me detendré solo un breve instante más en el único tema cantado en castellano de todo el disco (aunque no vas a entender una sola palabra), “Exorcismo Vaginal”. Y lo voy a hacer porque este rollo del gore mencionado anteriormente que se traen estos tíos hay que cogerlo con pinzas, o alguien cree realmente que Dave y sus secuaces se masturban mientras se estrangulan con una toalla mojada y ven una snaff movie. El tema habla de una pobre muchacha que es víctima de un exorcismo vaginal después de siete años de dolor y sufrimiento, pues en teoría tenía el mal dentro y había que extirparlo, pero el tema acaba con cuatro estrofas que lo dejan bien claro:

“Era o no verdad, que el diablo moraba
En su inocente cuerpo
O pudieran ser, simples ataques
De esquizofrenia”

Nada más, Avulsed son por derecho propio la banda de Death Metal más grande que ha parido la península, aunque la mitad de los metalheads ibéricos todavía no se hayan enterado. Y en este disco en especial estuvieron absolutamente sembrados. Tienen una sólida discografía, con trabajos muy buenos y algún que otro patinazo, pero nada de lo fabricado hasta la fecha se puede comparar con este increíble “Stawbound Orgasm”. No me corto, cinco cuernos 9,2/10, trabajo cien por cien recomendable a quien guste de pútrido Death Metal y a su vez disfrute de las buenas melodías.

PD: Por favor, no os pongáis palotes con la portada, que sois todos unos depravados.

PD 2: El enlace del primer tema ya contiene un link de youtube donde están los doce cortes, para ahorrar faena.