Atrophy - Socialized Hate

Enviado por Witchfyre el Lun, 20/09/2021 - 17:35
Atrophy

1. Chemical Dependency (04:07)
2. Killing Machine (03:47)
3. Matter of Attitude (03:25)
4. Preacher, Preacher (04:17)
5. Beer Bong (02:06)
6. Socialized Hate (5:03)
7. Best Defense (3:49)
8. Product of the Past (03:50)
9. Rest in Pieces (04:40)
10. Urban Decay (03:31)

Álbum completo: YouTube

A finales de los 80, Roadrunner Records, el otrora glorioso sello holandés que empezó acompañando a la NWOBHM y fue uno de los artífices de la explosión deathmetalera de principios de los 90, se sacó bandas como Atrophy hasta de debajo de las piedras y no por ello menos guapas. Sólo hay que echarle un vistazo a esa lista de reediciones de “bandas de mierda" como esta que, sin autorización en muchos de los casos, editó la gente de Metal Mind hace cosa de 15 años.

Oriundos de Arizona, pequeña extensión de la Bay Area con Flotsam and Jetsam y Sacred Reich como puntas de lanza, dos fueron los petardazos que arrearon estos pedazo de animales para cerrar la década. Como si el aire abrasador del desierto les confiriese esa personalidad inmisericorde, Atrophy dejaron para la posteridad dos auténticos misiles de thrash metal despiadado, sin mucha floritura, pero verdaderamente atronadores. No busques melodía, arreglos progresivos y “prima donnas” del Bel Canto, esto es puro thrash americano, de aquel que sólo pretendía desgarrarte la piel de la cara a tiras. No quería resultar grosero, pero lo cierto es que me lo pide el cuerpo, estos cinco chavales no se andaban con mariconadas y buscaban asestar, cuanto más fuerte mejor, una buena somanta de hostias en forma de auténtico thrash metal.

10 temas en 38 minutos me parecen toda una declaración de intenciones. Chemical Dependency, Killing Machine y Matter of Attitude no dan respiro. Son rápidos, certeros, agresivos, compactos… un bofetón tras otro, de derecha y de revés. Y encima las prestaciones que les sacó Bill Metoyer en estudio, como viene siendo habitual, la mejores. La batería es como un martillo pilón, los bombos de Tim Kelly van a toda hostia para ser 1988, las guitarras, aunque un pelín chicharreras, suenan súper agresivas y Brian Zimmerman… pues es un animal que se limita a destrozar como buenamente puede su garganta. Se le ve poco preocupado por las formas, está muy lejos de los Belladona, Russ Anderson o Erik A.K. que tanto lucían en otras bandas de thrash más sutiles, aunque en ningún momento echaremos en falta más talento en medio de una pandilla de animales como estos cinco.

A ver, que sus detallitos de cara a la galería también hay, como esa genial sección instrumental de Preacher, Preacher con sus solos melódicos y un trepidante duelo entre bajo y batería o el comienzo semiacústico del tema título. Que los chavales tocan un rato largo y no va a ser todo aniquilación sin compasión. Si hasta un James Gulotta tiene sus momentos de lucimiento personal, ya se le escucha bastante bien en todo el álbum, cosa rara. Sin embargo, no serán los alardes técnicos con lo que nos quedaremos al terminar Socialized Hate. Lo que nos queda en esas brutales Best Defense, Rest in Pieces y Urban Decay no será más que tralla, tralla y más tralla. Atentos fans de Slayer, Sacred Reich, Evildead, Dark Angel, Holy Terror y demás hijos de puta sanguinarios porque aquí tenéis en Atrophy unos duros contendientes al título de los pesos pesados.

Product of Society afloja ligeramente la marcha en una suerte de medio tiempo machacón, pero igual de potente, y Beer Bong es una cachonda oda a la cerveza que airea el dominio sobre la materia que tenían estos cinco jovenzuelos que debían pasar buena parte de su tiempo en proceso de documentación. Todo tocado con verdadera convicción y contundencia, no deja de maravillarme el nivelón que tenían este tipo de bandas que, a buen seguro, sudaban gotas de sangre en locales de ensayo y bares de mala muerte mientras se empapaban para letras como la de Beer Bong. Aquellos eran tiempos de grabación artesanal, la era analógica y, quien no llevaba bien curradas sus historias, no conseguía sonar así de empaquetadito, por mucho Bill Metoyer que se sentara tras la consola.

Escuchar Socialized Hate me pide inmediatez, pasar de escribir chorradas e ir al grano, así que lo voy a ir dejando, creo que se capta la idea. Amantes de la buena caña thrasher de la vieja escuela, no dudéis ni un instante con este, ni con su sucesor, Violent by Nature, un poco más maduro y casi igual de garrulo. A mí me cuesta mucho decantarme por alguno de ellos, andan muy parejos en prácticamente todo. Puestos a escuchar algo de thrash sin mucho miramiento, pocas apuestas hay más seguras que Atrophy y, probablemente, ni siquiera hayáis reparado en ellos. Esas portadas un poco feuchas tampoco es que ayuden precisamente, aunque me hace cierta gracia lo del payaso con los misiles yankees y soviéticos, muy fruto de su época. Tope años 80. Por todo lo demás, un buen zarpazo de thrash directo a la yugular. Cuatro cuernos inapelables.

8/10

- Brian Zimmerman: voces
- Chris Lykins: guitarra
- Rick Skowron: guitarra
- James Gulotta: bajo
- Tim Kelly: batería

Sello
Roadrunner Records