Anvil - Plugged in Permanent

Enviado por Sephiroth el Lun, 09/09/2019 - 16:50
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Época difícil los 90 para el Metal más clásico. El Grunge, Rock y Metal alternativo dominaban la escena más comercial en detrimento del Hard/Heavy clásico que lo había hecho en los 80, y en materia más extrema, a no ser que fueses Pantera, no te comías un rosco, con el Thrash Metal en plena caída tanto a nivel de popularidad como de calidad, con un montón de bandas suavizando o mutando su sonido(con mejores y peores resultados) o directamente olvidadas en el ostracismo, dándose ya a un nivel más underground la expansión del Death y del Black Metal.

Viendo como están las cosas, era previsible que a una banda de segunda línea dentro del Heavy clásico como los canadienses Anvil no les fuese muy bien que digamos.

Séptimo disco de estudio para los canadienses llamado Plugged in Permanent. Año 1996. A estas alturas, tenías dos opciones. O proseguías fiel a tu estilo(y no te comías nada) o lo mutabas de alguna manera. Pues, si bien Anvil no se vendieron(ni mucho menos) hasta ellos intentaron darle una pequeña vuelta de tuerca a su sonido. Eso si, bastante ligera. Tampoco es de esperarse aquí un Black Album o un SOWN.

Es algo que ya se había visto un poco en su anterior disco, Worth the Weight del 91, un disco que nos mostraba a los Anvil de siempre, pero con un poso más potentorro, con momentos que podían recordar al Painkiller, a los Metallica del ...And Justice for All o, muy puntualmente, a los Pantera del Cowboys. Intuyo que la llegada de alguien como Sebastian Marino(futuro guitarrista en Overkill y que solo estaría en este disco en Anvil) algo tuvo que ver.

Plugged in Permanent no haría más que seguir esa línea más cañera trazada en el anterior disco de manera un poco más marcada, aunque, desde luego, la jugada no les saldría tan bien como en aquel disco, como veremos. La portada se me antoja bastante simplona, con el típico yunque de las portadas de Anvil aplastando una guitarra acústica, sin lugar a dudas las tienen mejores. Las cosas claritas, eso si.

El primer tema, 'Racial Hostility', nos muestra por donde van los tiros. Caña parda, velocidad, guitarras a tope, solos por todas partes... un cojonudo híbrido Anthrax-Metallica perfecto para abrir la lata. Eso si, la voz de Lips suena más desgastada que de costumbre. Desde luego, el tío nunca fue un fenómeno vocal pero, aun así, sonaba mejor en anteriores entregas.

'Doctor Kevorkian' es más leñera aun si cabe, Thrash con pequeño toque 'groovie' por un tubo, con el toque Anthrax de nuevo presente y hasta cierto poso Pantera.

Por su parte, es 'Smokin' Green' los canadienses sacan a relucir su vena más speedica, un tema con gran tufo a Mötorhead(hasta el punto de que Lips casi suena a Lemmy en las voces), cañero y repleto de actidud.

'Destined for Doom'(que, curiosamente, en sus primeros compases puede recordar al 'Freezing Moon' de Mayhem, aunque luego nada que ver) es de los mejores temas del disco. Toque Doom con mucho poso Black Sabbath, toneladas de poderío, Lips atinado en las voces(el estribillo está logrado), grandes solos... Un tema muy completo.

No tan lograda está 'Killer Hill', un tema que, directamente, es puro relleno, con una percusión fallida, que hace que el tema suene atropellado, al que además le falta claramente algo para enganchar al oyente.

'Face Pull' y 'I'm Trying to Sleep'(ambas de narutaleza muy similar, Speed con tufo a Mötorhead, demasiado por momentos, con Lips buscando sonar a Lemmy de nuevo, sin el carisma de éste) y 'Five Knuckle Shuffle'(un tema de Heavy Metal potente y directo, aunque quizás le falte algo más) demuestran que Anvil seguían teniendo las ganas y la actitud intactas. Sin embargo, se nota que la inspiración estaba un poco más justa, además de que el sonar tanto a otros les pasa factura por momentos.

Para finalizar, nos sueltan dos temas bastante acertados y que finalizan el disco de buenas maneras, 'Truth or Consequence'(más leña Thrash, con sabor a Anthrax o Metallica de nuevo, muy buen rifferío en general y solos por todas partes) y 'Guilty(una especie de híbrido entre Black Sabbath y el Black Album de Metallica que le da un final curioso al álbum).

3 cuernos bastante bajos para el séptimo disco de Anvil. Hay potencia, ganas, actitud, cojones... pero poco más. Muy poco más. Anvil saben hacerlo mucho mejor, ya lo han hecho en todos sus anteriores discos(y en posteriores también). Además, el sonido demasiado parecido a otras bandas y tan poco personal que se marcan aquí resta bastantes puntos también. Posiblemente, de lo peor que han hecho en toda su carrera, un trabajo decente, pero que peca de irregular.

Steve 'Lips' Kudlow: Voz, guitarra
Ivan Hurd: Guitarra
Glenn Five: Bajo
Robb Reiner: Batería